Del mar nos llega mucho conocimiento, el drama que sufren algunos marineros hace eco en el día a día de las calles y de él se sacan útiles reflexiones. Hay un dicho popular que reza: "a barco nuevo, capitán viejo". En ese sentido, aprendemos del mar. Carlos, nuestro capitán goza de una experiencia sinigual, por eso lidera desde la zafa esta organización de jugadores movidos por un mismo objetivo. De este modo, no sólo la actitud y la calidad marcan la diferencia, también el valor y el carisma dan la victoria en un encuentro.
Carlos ha marcado su primer tanto oficial esta temporada. Seguro que se siente satisfecho por eso, pese a que no sea su labor. Su trabajo sobrepasa a la de cualquier otro compañero, pues traslada las órdenes del entrenador al terreno de juego. Asimismo, orquesta un buen clima que construye la capacidad mental para no claudicar en ciertas situaciones: se preocupa por los delanteros cuando no están goleadores y el grito de ánimo más fuerte en el campo siempre es el suyo.
Un capitán es un líder, un portavoz carismático. La voz y el ritmo de un grupo homogéneo. Como un capitán dando directrices a sus marineros, Carlos hilvana en el campo el esquema humano perfecto que han preparado durante la semana. Y como cualquier marino que se precie, viento a toda vela, rumbo fijo hacia la victoria, que mientras exista oleaje por surcar habrá mar con el que narrar la inmensidad de una victoria.
Author: Deogràcies Pagá